Alguna vez te has preguntado ¿soy egoísta si no hago lo que los otros quieren?
Decir no, no significa dejar de ser amable o ser una persona terrible. Aunque no lo parezca, decir un no a tiempo puede evitar conflictos y malas caras.
Es desarrollar el arte de la asertividad y el respeto por ti mismo. Toma en cuenta siempre la forma y el momento en que lo dices.
Te comparto 7 ideas en las que podrías apoyarte para decir no sin sentirte la peor persona por hacerlo.
¿Soy Egoísta Al Decir No? 7 Ideas Para Decir No Sin Sentirme Culpable
1 Revisa Tu Situación.
Si vives frustrado, enojado, estresado y quejándote la mayoría del tiempo, quizá ha llegado la hora de decir unos cuantos nos.
Muchas veces es vital establecer límites saludables en nuestras relaciones, con la familia, en el trabajo, con los amigos, etc.
Cuántas veces has terminando haciendo algo con lo que no te sientes a gusto, o has dejado de hacer cosas para tu bienestar por hacer lo que otra persona te pide.
2 No Eres Omnipresente.
Te saturas de demasiadas cosas, y esto sólo complica mucho tu vida y puede generarte inestabilidad.
Reconoce cuando estás haciendo algo por alguien más, y es algo que perfectamente la persona puede hacer por sí misma.
Hay situaciones en el que estarás ayudando más a esa persona si le permites aprender por sí misma, hay lecciones o experiencias que son parte de su aprendizaje, y el hecho de querer “ayudarle”, realmente le está impidiendo vivir su lección y con eso poder crecer.
3 ¿Realmente Crees Posible Complacer A Todo Mundo?
Cada quien es responsable de lo que elige hacer o pensar, muchas veces, no importa lo que hagas, no faltará quien crea que “debes” hacer las cosas de otra forma.
Al final todos tenemos nuestra propia opinión. Como dicta un famoso dicho, cada cabeza es un mundo, pretender ser siempre complaciente con todos es una mera ilusión que terminará agotándote emocional, corporal y mentalmente.
4 Chantaje, Manipulación, Culpa.
Tanto nosotros como los demás, utilizamos frases como “después de todo lo que he hecho por ti”.
Hay ocasiones en que el hecho de que digas siempre, o casi siempre, sí a esas personas, pueda ser porque has querido compensar algo por lo que te sientas culpable.
Puedes estar conviviendo con personas que utilizan contigo el chantaje o manipulación, de hecho, puedes reconocer que incluso tú mismo lo has hecho. Es importante que también te hagas consciente de esto y empezar a dejar libre a los otros y ser libre también tú.
5 ¿Qué Crees Que Pasará Si Dices No?
Los seres humanos a veces tendemos a imaginar el peor de los escenarios. Tal vez crees que tu no significará el final del mundo, el final de una amistad, cuando realmente no será tan desastroso el resultado.
Si aprendes a decir no desde un corazón en paz, te sorprenderás con los resultados.
Quien se preocupa realmente por ti, quien te respeta y ama verdaderamente, sin duda en algún momento entenderá que el límite que has colocado representa un bien para ti.
6 Terminarás Muy Alejado De Tu Verdadera Esencia.
Ceder muchas veces a lo que los demás quieren que hagas, irá diluyendo tus auténticas necesidades.
Dejas de ver donde inicias tú y donde empiezan los otros, y llega un momento en que no sabes ni siquiera lo que quieres para ti.
Culpas a los demás, sin reconocer que has sido tu quien ha cedido su poder a otros sobre tu vida.
7 ¿Qué Estás Ganando Al Decir No?
Es momento de que te permitas decir no, sin sentirte mal por ello.
Ganas paz mental, tiempo para invertir en tus sueños y metas, distinguirás a las personas que verdaderamente te aman por quien eres y no por lo que haces por ellas.
No se trata de vivir aislado, diciendo a todos y a todo que no. Se trata de tomar responsabilidad y control de tus decisiones, lograr distinguir con sabiduría lo que quieres o no quieres, expresarlo con asertividad y evitar conflictos.
Y cuando decides hacer algo por alguien, que sea con un total convencimiento y la plena voluntad de que tú así lo quieres y que si la decisión implica ciertos sacrificios, estás de acuerdo en aceptarlos y hacer las cosas con alegría.